El espacio resultante no solo sería un recinto ferial para organizar eventos por parte del ayuntamiento o de otras instituciones, sino que pretende ser un “espacio público para el uso diario y espontáneo de vecinos y visitantes”, según dice la memoria del anteproyecto. Una “máquina de movilización ciudadana”.
La estrategia de intervención, en más de 4.500 metros cuadrados, incluye la apertura del espacio ferial al entorno, la corrección de la cota del auditorio al nivel de calle para hacerlo accesible y el rediseño del escenario, así como sus dependencias anexas y los quioscos que dotan de baños y cafeterías al auditorio al aire libre.
Este nuevo espacio debe invitar al uso espontáneo y diario de vecinos y visitantes, complementando así los eventos culturales y populares que se suceden de forma puntal a lo largo del año.
El recinto ferial y su entorno incluiría una solución de drenaje basada en sistemas naturales de infiltración que evitase comprometer el espacio público en caso de inundación, ya que se encuentra en la desembocadura del barranco. Las graderías de piedra también están pensadas para absorber el agua.
El recinto ferial y su entorno incluiría una solución de drenaje basada en sistemas naturales de infiltración que evitase comprometer el espacio público en caso de inundación, ya que se encuentra en la desembocadura del barranco. Las graderías de piedra también están pensadas para absorber el agua.
El anteproyecto ya está en estudio por parte tanto del Ayuntamiento de Tuineje como del propio Cabildo de Fuerteventura, que deben dar su visto bueno para la ejecución.
Se puede consultar más información sobre este proyecto en el apartado Work de nuestra página web